Venezuela: el racismo desvergonzado de la contrarrevolución

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El gobierno revolucionario de Chavez invertió 300 millones de dolares en la construcción del metrocable. El metrocable elimina horas de la subida y bajada que normalmente la gente hacia a pie para llegar al trabajo, la escuela, centros de saludo, y otros sitios importantes. Beneficia a miles de habitantes de San Agustín, la mayoría de ellos siendo afro-descendientes.

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Por Arlene Eisen

6 abril 2014 -- Sinpermiso.info -- Los grandes medios de comunicación, aquí y en Venezuela, han triunfado ampliamente dando un rostro democrático al movimiento racista, esencialmente fascista, de las calles en Venezuela. Coaliciones tradicionalmente antirracistas han ignorado Venezuela. Es hora de ser solidarios con la mayoría del pueblo venezolano.

Caracas, última hora de la mañana del pasado 12 de febrero. Desde el restaurante del hotel situado en una esquina de la Plaza Venezuela podemos oír los cantos, pero hay demasiado barullo para entender. ¿Qué dicen? ¿Maduro Salida, Maduro/burro salida, o qué? Desde la ventana vemos a las gentes, casi todos blancos sonrientes bajando por la calle para sumarsea la enorme manifestación antigobierno que dio el tiro de salida a las presentes revueltas en Venezuela.

Olga, la jefa del restaurante, es de piel clara, rubio apagado el pelo y color caramelo los ojos. Es una más del 42% de venezolanos que se identifican a sí mismos como blancos en el último censo venezolano. Desde detrás de la barra, suele saludar a la gente sin sonreír. Daórdenes a las mujeres indígenas que trabajan en la cocina. Hoy se ríe con una caricatura publicada en unos de los muchos diarios virulentamente antigubernamentales. Le pregunto si hay algún reportaje interesante en el periódico. Se encoje de hombros, pero la pregunta desencadena una larga parrafada que destila todo su odio al chavismo.

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